Más de 1.000 mancomunidades en el punto de mira: la FEMP pide su desaparición
El reforzamiento del papel de las Diputaciones aboca a la desaparición de estas organizaciones supramunicipales que se superponen con las comarcas, consejos insulares, cabildos, veguerías, ledanías y asocios. Hacienda las va a someter a un examen de un año para ver si tiene razón de ser su existencia
Cristina de la Hoz (24-06-2012)
En España hay un total de 1.026 mancomunidades según el registro de entidades locales de Hacienda y Administraciones Públicas. Su supervivencia pende de un hilo tras la intención del Ministerio, con el apoyo de la Federación Española de Muncipios y Provincias (FEMP), de reforzar el papel de las Diputaciones Provinciales, destinadas a asumir las funciones de aquellos ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes que no estén en condiciones de prestar todos los servicios necesarios a sus vecinos. Ésto convertiría a las mancomunidades en unas estructuras innecesarias, que vienen a añadir más confusión a una estructura de superposiciones donde hay muchos y variados niveles administrativos.
Las mancomunidades, algunas de ellas constituídas hace más de veinticinco años, conviven con los municipios y las diputaciones, pero también con las comarcas aragonesas, castellanoleonesas o andaluzas, con las pretendidas veguerías catalanas, con los cabildos canarios, con los consejos insulares de Baleares o con las parroquias gallegas por poner unos ejemplos de esa complejidad organizativa. A ellos se suman otras organizaciones menos conocidas como los asocios o las ledanías. Todo un puzzle que se pretende simplificar aunque, de momento, la propuesta de Hacienda es bastante conservadora al respecto. A lo sumo, ha anunciado que someterá a las mancomunidades a un "examen" a prueba de un año de duración para ver si deben seguir prestando sus servicios.
Sin embargo, esa no es la última palabra. La secretaría de Estado de Administraciones Públicas, al frente de la cual se sienta Antonio Beteta, debe cerrar un acuerdo a varias bandas que incluya a la FEMP y a la oposición, y la FEMP se ha manifestado claramente a favor de la desaparición de las mismas. Su todavía presidente, el alcalde de Sevilla Juan Antonio Zoido, ha defendido que "que hay ningún documento que diga que sobran municipios, que acredite que eliminando ayuntamientos se produzca mayor eficacia en la prestación de servicios". También ha defendido las diputaciones como "pieza fundamental" en la prestación de determinados servicios públicos que no pueden ofrecer muchos pequeños ayuntamientos de España (más del 83 por ciento tiene menos de 5.000 habitantes y el 90 por ciento de 20.000) como la recogida de basuras, por lo que "potenciar las diputaciones es positivo".
La Comunidad de Castilla y León está a la cabeza en el número de mancomunidades, 271. Le sigue Castilla-La Mancha con 136
Pero tras estas consideraciones ha puntualizado que "hoy por hoy sobran muchas mancomunidades porque son estructuras paralelas que se han ido creando entre ayuntamientos y diputaciones. Por ahí se puede ir empezando y hay que redefinir", ha defendido el todavía responsable de la FEMP, al menos, hasta que se celebre a mediados de julio el congreso de los populares andaluces, con Zoido de sustituto de Javier Arenas.
"Mancomunidad de la Comarca de mármol blanco de Macael", "Mancomunidad de Municipios de la Comarca del Campo de Gibraltar", "Mancomunidad de municipios para la promoción de las pistas de esquí nórdico" son unos ejemplos tomados de la panoplia de mancomunidades de España. Muchas de ellas no persiguen colaborar en la prestación de servicios, sino que comparten intereses comunes, en la mayor parte de índole económica por afectar a sectores productivos de la zona. Quizá por ello la nueva tarea que asuman las diputaciones en la reforma de las Administraciones Públicas no sea del todo sustitutiva de algunas mancomunidades.
Castilla y León es la autonomía cuyos municipios --la gran mayoría de pequeñas dimensiones-- más se organizan en mancomunidades, hasta alcanzar las 271. Les siguen Castila-La Mancha (con 136) y Andalucía (con 87). Pero otras Comunidades de dimensiones más pequeñas como Madrid o Navarra agrupan 53 y 54 respectivamente. Murcia, sin embargo, está a la cola en el número de mancomunidades, con tan sólo nueve. Beteta debe cerrar un acuerdo que quiere culminado antes de agosto, para ello ya se ha reunido en distintas ocasiones con Zoido, con Javier Arenas, que es el interlocutor del PP en esta materia, y con el socialista y responsable de políticas municipal del PSOE, Gaspar Zarrías.
El reforzamiento del papel de las Diputaciones aboca a la desaparición de estas organizaciones supramunicipales que se superponen con las comarcas, consejos insulares, cabildos, veguerías, ledanías y asocios. Hacienda las va a someter a un examen de un año para ver si tiene razón de ser su existencia
Cristina de la Hoz (24-06-2012)
En España hay un total de 1.026 mancomunidades según el registro de entidades locales de Hacienda y Administraciones Públicas. Su supervivencia pende de un hilo tras la intención del Ministerio, con el apoyo de la Federación Española de Muncipios y Provincias (FEMP), de reforzar el papel de las Diputaciones Provinciales, destinadas a asumir las funciones de aquellos ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes que no estén en condiciones de prestar todos los servicios necesarios a sus vecinos. Ésto convertiría a las mancomunidades en unas estructuras innecesarias, que vienen a añadir más confusión a una estructura de superposiciones donde hay muchos y variados niveles administrativos.
Las mancomunidades, algunas de ellas constituídas hace más de veinticinco años, conviven con los municipios y las diputaciones, pero también con las comarcas aragonesas, castellanoleonesas o andaluzas, con las pretendidas veguerías catalanas, con los cabildos canarios, con los consejos insulares de Baleares o con las parroquias gallegas por poner unos ejemplos de esa complejidad organizativa. A ellos se suman otras organizaciones menos conocidas como los asocios o las ledanías. Todo un puzzle que se pretende simplificar aunque, de momento, la propuesta de Hacienda es bastante conservadora al respecto. A lo sumo, ha anunciado que someterá a las mancomunidades a un "examen" a prueba de un año de duración para ver si deben seguir prestando sus servicios.
Sin embargo, esa no es la última palabra. La secretaría de Estado de Administraciones Públicas, al frente de la cual se sienta Antonio Beteta, debe cerrar un acuerdo a varias bandas que incluya a la FEMP y a la oposición, y la FEMP se ha manifestado claramente a favor de la desaparición de las mismas. Su todavía presidente, el alcalde de Sevilla Juan Antonio Zoido, ha defendido que "que hay ningún documento que diga que sobran municipios, que acredite que eliminando ayuntamientos se produzca mayor eficacia en la prestación de servicios". También ha defendido las diputaciones como "pieza fundamental" en la prestación de determinados servicios públicos que no pueden ofrecer muchos pequeños ayuntamientos de España (más del 83 por ciento tiene menos de 5.000 habitantes y el 90 por ciento de 20.000) como la recogida de basuras, por lo que "potenciar las diputaciones es positivo".
La Comunidad de Castilla y León está a la cabeza en el número de mancomunidades, 271. Le sigue Castilla-La Mancha con 136
Pero tras estas consideraciones ha puntualizado que "hoy por hoy sobran muchas mancomunidades porque son estructuras paralelas que se han ido creando entre ayuntamientos y diputaciones. Por ahí se puede ir empezando y hay que redefinir", ha defendido el todavía responsable de la FEMP, al menos, hasta que se celebre a mediados de julio el congreso de los populares andaluces, con Zoido de sustituto de Javier Arenas.
"Mancomunidad de la Comarca de mármol blanco de Macael", "Mancomunidad de Municipios de la Comarca del Campo de Gibraltar", "Mancomunidad de municipios para la promoción de las pistas de esquí nórdico" son unos ejemplos tomados de la panoplia de mancomunidades de España. Muchas de ellas no persiguen colaborar en la prestación de servicios, sino que comparten intereses comunes, en la mayor parte de índole económica por afectar a sectores productivos de la zona. Quizá por ello la nueva tarea que asuman las diputaciones en la reforma de las Administraciones Públicas no sea del todo sustitutiva de algunas mancomunidades.
Castilla y León es la autonomía cuyos municipios --la gran mayoría de pequeñas dimensiones-- más se organizan en mancomunidades, hasta alcanzar las 271. Les siguen Castila-La Mancha (con 136) y Andalucía (con 87). Pero otras Comunidades de dimensiones más pequeñas como Madrid o Navarra agrupan 53 y 54 respectivamente. Murcia, sin embargo, está a la cola en el número de mancomunidades, con tan sólo nueve. Beteta debe cerrar un acuerdo que quiere culminado antes de agosto, para ello ya se ha reunido en distintas ocasiones con Zoido, con Javier Arenas, que es el interlocutor del PP en esta materia, y con el socialista y responsable de políticas municipal del PSOE, Gaspar Zarrías.
2 comentarios:
El ayuntamiento más próximo tenía que estar en Ponferrada.
No ganamos para sustos: entre Doña rosa Jefa de Los Gal y Doña Ana alcaldessa de Acebedo podemos ir persinándonos con la mano siniestra.
El ayuntamiento más próximo no debería existir.
Publicar un comentario