Antes de seguir adelante os recordaremos que nunca nos debemos fiar del margen de error existente en el velocímetro de nuestro coche y en los aparatos de medición de los agentes. Aunque dependa de cada marca y modelo, siempre existe un pequeño error en la velocidad mostrada por el velocímetro, que generalmente muestra una velocidad superior a la real y a la que por tanto determinarán los radares de la DGT.