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24 febrero, 2015

LA JUNTA APUESTA POR BUSCAR UN PACTO NACIONAL FRENTE A LA DESPOBLACIÓN

La Junta apuesta por buscar un pacto nacional frente a la despoblación rural

La directora general de Relaciones Institucionales y Acción Exterior, María de Diego, apostó por un pacto nacional por el cambio demográfico que afronte los retos que imponen los nuevos desafíos poblacionales vinculados con la dispersión, la despoblación y el envejecimiento. De Diego compareció ayer en el Senado ante la Comisión Especial de Estudio sobre las medidas a desarrollar para evitar la despoblación de las zonas de montaña.
En ese pacto, De Diego defendió la necesidad de establecer una «estrategia nacional» en la que «entre todos» se definan la medidas para «paliar y hacer frente a esos desafíos» demográficos ya que se trata una problemática en la que «nos debemos implicar todos». Así, invitó a todas las administraciones y agentes sociales a tomar parte en ésta búsqueda de soluciones que, a su juicio, pasa por que esa estrategia «debe abordar cuestiones vinculadas con la financiación autonómica» ya que «es evidente que prestar servicios en el ámbito rural o zonas con problemas demográficos es mucho más caro que hacerlo en el entorno urbano», según recogió Ical.
La directora general de Relaciones Institucionales y Acción Exterior mencionó que en Castilla y León se mantienen en funcionamiento «escuelas con cuatro alumnos o consultorios médicos con menos de 50 habitantes, y eso es mucho más caro», dijo. Además, la Comunidad cuenta con 3.650 consultorios locales, 1.400 en núcleos con menos de 50 habitantes. En definitiva, aseguró que para la Junta es un 50% más caro prestar servicios en el entorno rural que en el urbano. La directora general de Relaciones Institucionales acudió a la Cámara Alta para exponer ante los senadores de distintos grupos políticos la experiencia de Castilla y León en esta materia.
La comunidad tiene una población de en torno a 2,5 millones de habitantes, ubicados en el tercer territorio más extenso de Europa. «Esto nos da una densidad de población que es sólo un tercio de la media de España, 26 frente a 97. Y que, por supuesto, es aún mucho más baja en el medio rural», destacó De Diego.
Asimismo, tiene aproximadamente un 26 por ciento de su población en pueblos de menos de 2.000 habitantes, en el resto de España este porcentaje desciende hasta un 4,8 por ciento. El 41 por ciento de la población de España que vive en municipios de menos de 500 habitantes reside en la Comunidad. Además, dada su alta ruralidad y la incidencia de los movimientos migratorios de los años 60 en la pirámide poblacional, aún más intensa en las zonas rurales, los desafíos demográficos son patentes en todo su territorio.
La importancia del medio rural es, a su juicio, el principal «hecho diferencial» de Castilla y León. 2.248 municipios, de los que tres cuartas partes tienen menos de 500 habitantes.

28 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Por qué si se está despoblando, -Acebedo- y su ayuntamiento calfican terrenos rurales en urbanos? La pasta para la casta parasitaria,no sé si llegarán a tiempo a fastidiar al ciudadano con impuestos para estas tropelías sin plusvalías.

Anónimo dijo...


A mi me encantaría que todo esto fuese un desierto. No como el Gobi, el Ártico, el Sahara o Siberia, no.
Un desierto auténtico, sin un solo habitante. Únicamente un embalse y, de visita, los que lo mantengan.
Desaparecería nuestra decadente raza, de inútiles y cobardes, de la que solo queda algún rastro.
Pero, no os creáis insultados los que leeis esto, porque la culpa no es vuestra. Es nuestra, la de los que tenemos más de sesenta y cinco años.
No supimos transmitiros el orgullo de ir con la vecera, de tener ovejas, de ordeñar dos veces al día, de cantar viejas canciones, de contar viejos cuentos al lado del trébede, en la hila, de ver irse a la hija a Cistierna a estudiar, y luego a León para ser maestra...
Hemos criado dos generaciones. Una de gente con estudios, y otra de camareros y fregonas. Hijos y nietos.
Os hemos mandado a fuera y, eso no es culpa nuestra, habéis aprendido la peor de las ciencias: el egoísmo.
Los jóvenes que quedáis aquí -y digo jóvenes a los que tenéis menos de 50 años- no es que estéis desmoralizados, no. Es que habéis adquirido el concepto de que sois ciudadanos, gentes de ciudad. Aborrecéis lo que a mí me llena de orgullo. Ser pueblerino, paisano, paleto, algo que no es, de ninguna manera que se vea, humillante.
Me gustaría -algo que es totalmente imposible por mi edad- ser el último. Ver esto deshabitado.
Que no me entierren. que me coma mi perro.Y, a este, los lobos.

Alfonso Prellezo dijo...


Esto esta pal arrastre.
El último que apague la luz.

Anónimo dijo...


¡¡¡ QUE PESAOS LOS DE ACEBEDO !!! ME LA SOPLA UPL, AP, PSOE, IU, PODEMOS, CIUDADANOS, UPYD Y EL CRISTO DE LA MADRE QUE LOS PARIÓ. PASO DE POLÍTICA Y DE PELMAS. ¡¡¡ DEJARNOS EN PAZ COJONES !!! :( :( :(

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con el abuelo del post largo.
Os sobra soberbia y os falta orgullo de ser como sois.
Y tengo 26 años, mi padre es de Palencia y mi abuelo de Siero.
No suelo ir mucho por ahí porque no tengo cas, por razones obvias. Pero algún verano voy a Barniedo, a casa de una prima.
Y me da mucha pena. Si tuviese una casa me asentaría ahí y montaría algo.
Soy ingeniero forestal en paro (hasta el 16 de este mes, que estuve trabajando en publicidad telefónica para JAZZTEL)
Me gustaría volver a la tierra de mi abuelo a vivir, pero no sé adonde que no me cueste que no tengo.

Anónimo dijo...

No todos los políticos son iguales

¡Pesados?

Pesados son aquellos que no espetan los derechos de los demás ,comen y arrasan todo lo que se pone por delante y encima los propietarios son amenazados en muchas ocasiones,

Algunos están deseando que los propietario no aparezcan por los pueblos para apoderarse de todo.

lo malo es que están consiguiéndolo




Anónimo dijo...

El post del señor mayor es de lo mejor que se a escrito aqui en mucho tiempo,solo de leerlo se me caen las lagrimas

Anónimo dijo...

"No todos los políticos son iguales

¡Pesados?

Pesados son aquellos que no espetan los derechos de los demás ,comen y arrasan todo lo que se pone por delante y encima los propietarios son amenazados en muchas ocasiones,

Algunos están deseando que los propietario no aparezcan por los pueblos para apoderarse de todo.

lo malo es que están consiguiéndolo"

No estoy de acuerdo con usted. Los políticos, en esta tierra, son solo un problema parcial. Y muy pequeño en lo que se refiere a este asunto del vaciamiento poblacional.
El problema somos nosotros mismos.
Me parece muy coherente lo que ha escrito el segundo posteador: Nos sobra soberbia y carecemos de orgullo.
Hay que ignorar el muro de La Rmolina y utilizar lo que tenemos. No menospreciarnos unos a otros, sino servirnos entre nosotros como referencia.
Y hacer público lo poco o mucho que vayamos consiguiendo.

Espero que nadie se moleste y, en cambio, despierte de esta situación que nos ha llevado a despreciarnos a nosotros mismos.

Si no, desapareceremos.

Anónimo dijo...


Yo tambien estoy de acuerdo con el señor ese que dice que la culpa es nuestra
no hay nadie que nos quite la envidia el ir de sobraos sin saber poner bien un ladrillo en ved de ser lo que se debe que es ser pastores labradores artesanos y
estar orgullosos de serlo

Anónimo dijo...


Esto va a ser un desierto dentro de poco. La gente se morirá y los que queden dejarán de ir a los bares porque estarán ellos solos con el del chigre que también será viejo y se cabrearan entre ellos.
Hecharan el cierre.
Quedaran unos pocos mayores de 40 años para hacerles chapuzas en sus casas a los veraneantes que vendrán 1 mes al año.
Pero los veraneantes llamarán por el móvil a albañiles de Cistierna Potes o Leon porque lo hacen mejor y mas barato.
Los currantes se irán a Leon o otro sitio porque sus mujeres les diran que esu rapaz tiene que estudiar.
Los que no tengan mujer serán los que queden para hechar la llave.
El último, que conecte la alarma de Securitas
SALUDOS

Anónimo dijo...



¡Es horrible!
Hay alguno en algún pueblo de esta zona que se pregunta: ¿Y, a mí, quién me enterrará en el cementerio?
:( :( :(

Juan Sordo dijo...

Miguel, este tema es crítico. ¿No crees que es un asunto para hacer un monográfico en la Revista sobre el gravísimo problema de la despoblación de nuestra tierra?
Quizá se pudiera hacer un número extra este verano, cuando más gente compra la Revista, analizando objetivamente el tema y buscando soluciones efectivas. Igual se podría hacer una encuesta...
Lo digo porque tú "tienes mano" en la Revista. Aurelio quizá se pueda encargar de coordinarlo.
Un afectuoso saludo.

Anónimo dijo...


Mira que he leido esteforo ,la Revista Comarcal y Facebook, pero esta entrada es la que peor sabor de boca m ha dejado de todos.
Esa verdad todo lo que se ha opinado.
Tengo sensación de rabia y al mismo tiempo verguenza.
A mi marido le pasa lo mismo y no es de aqui.

Anónimo dijo...


Para Juan sordo:
Quien le la revista?

Miguel Valladares dijo...

Para Juan Sordo:

Hablar de la despoblación es complicado, no es un problema unicamente del mundo rural, tambien las ciudades se despueblan, mira Detroit, o cualquier ciudad que por deslocalización de una empresa grande pierde habitantes, Asturias, León. No esta ligado al mundo rural sino a conceptos económicos, de rendimientos, cuando los empresarios de quejan de falta de movilidad de los trabajadores está hablando de despoblación. La producción y el rendimiento del capital por encima de cualquier cosa.
Otra cosa es debatir si un área en particular tiene recursos, calificar y cuantificar esos recursos, si estos recursos están suficientemente aprovechados y si la población resultante está por encima o por debajo de los necesarios o consecuentes con la explotación de los recursos.

Anónimo dijo...

Jajaja
Sr. Valladares, desde luego ese debate es muy interesante, pero no se puede hacer a través de este foro, enseguida te sale un LELO que no LELA revista y LOLO A LOMAR POR LULO.
Ánimo y a la Revista

Juan Sordo dijo...


Miguel: Los recursos existen
Hablaba hace un par de semanas con Felipe Benito, en Santander, sobre el enorme descalabro que supuso el pantano.
Pipe decía que es la causa y el efecto. Que sin la presa (de La Remolina, apostillaba yo, que tenemos más presas...), decía Pipe, Riaño y la comarca, sería otro mundo.
Dudaba yo y él persistía en que la vega de Riaño sería un imán para -exagerado que es- el Universo.
Hablábale yo de que, antes de comenzar los años (lejanos para mí) 80 del siglo en que hemos nacido, Riaño era un pueblo venido a menos, con las fachadas de las casas desconchadas, un ayuntamiento sin vida, sin juzgado, una feria en la que ya era menguado el ganado, una gasolinera que pasaba desapercibida al automovilista, una panadería en lo alto del pueblo, la ferretería roñosa, los bares... mejores los había en Marruecos.
Le explicaba yo que los que,entonces, eramos aún "razonablemente" jóvenes, 0 nos fuimos, o nos habíamos ido.
En mi caso no fue el embalse (ya me había ido) Fue la siega, el Bachillerato en Cistierna, la vecera, el boquero del pajar, no entender la filosofía sobre la vida que movía a mi padre (Q.E.P.D.) a hacer siempre lo mismo...
Miguel, disculpas el problema mencionando a Detroit... ¿Dónde está Detroit?¿Es extrapolable a nuestra tierrina?
Esa ciudad (mayor que mi pueblo. Incluso mayor que León) fué una ciudad de aluvión. Recibió una enorme inmigración como consecuencia del negocio del automóvil. A finales de los 70 empezó a quebrar el negocio cuando el petróleo quebró.
Los inmigrantes, sin trabajo, empezarona a emigrar a otros sitios. A principios del siglo actual, Detroit estaba vacío (y con un gasto en servicios, para 1/4 de la población que hubo antes, enorme) Detroit, como un jersey, dio de sí y cuando lo escaldaron, encogió.
Nuestra tierra no. No creció de verdad nunca. En los 70 se vivió de la leche (cita literal: me refiero con "vivir de la leche", no a vivir cojonudamente, sino a vivir de la ubre), por ejemplo.
Había cierta prosperidad. Pero ibas a Boca a comer y te daban un filete que no se veía, ibas a riaño a por un clavo y era puro oxido y roña, ibas a Burón por hierba y no la habían segado, a por carne a Portilla y olía a podrido. Nos fuimos...
En los 90 (yo entonces pescaba y no me caía en el rio. ¡Puta vejez!) había pescadores foráneos. Había, todavía, truchas. Y se pescaban sin dificultad (solo las justas para cenar)
A principios de los 90,¡Jódete Manuela!, todavía había veceras (ridículas, pero las había)
Decía yo a Pipe que la culpa no era de la Confederación, ni del PSOE, ni del dictador. Le decía que la culpa era mía, por haberme ido... cuando no hacía falta que me fuese.
Piénsalo.

Anónimo dijo...


Porque no se puede hacer en este foro?
Discutir se puede siempre y en cualquier foro, este o otro.
Yo no me cosidero una LELA y estoy suscrita a la revista.
Tenga mas respeto
Me encanta esta discusiónpor que creo que es verdad que nos falta orgullo hacia fuera y sobervia hacia dentro.
Lo digo sin querer insultar a nadie, pero me ha molestado.
Bs

Miguel Valladares dijo...

Juan, me niego a negar el pantano, lo he sufrido en mis carnes, ¡como para negarlo!
Sigo pensando que no es un problema únicamente del mundo rural.
¿Que es lo que se quiere de la montaña? ¿Cuales son los objetivos?

¿Que es lo que se demanda del mundo rural?
¿lo tenemos?
¿tenemos capacidad para ponerlo en marcha?



Juan Sordo dijo...


Las preguntas se pueden responder con pregunas, "a la gallega"
P: ¿Qué es lo que se quiere de la montaña?
R: En realidad, la pregunta debería ser ¿QUIÉN quiere qué? ¿Los pocos que quedamos aquí?
77,16% de pensionistas (de los que el 89,56% provienen del antiguo Régimen S. Agrario y el resto del Régimen General).
Del ese, casi, 90%, el 9,88% es por incapacidad laboral en todas sus graduaciones, desde transitoria a absoluta)
Del aprx. 23% de los teóricos "activos", solo se sabe que un 12,80% percibe prestaciones por desempleo (para mí, y es una apreciación personal, es algo absolutamente falso, pues no conozco a ninguno de los de mi zona que esté cobrando el seguro de desempleo y no hagan chapuzas, sobre todo de junio a noviembre, carísimas casi todas ellas comparadas con los costes estándar de las capitales de provincia cercanas)

P: ¿Cuales son los objetivos?
R: ¿Hay algún objetivo? (alguno sólido) ¿Quién tiene un solo objetivo a largo plazo? (que no sea vivir de quejarse)
No solo no se crean medios de vida, sino que desaparecen explotaciones ganaderas tradicionales, comercio al por menor, hostelería... Generalmente, por desengaño y desgana. Desde antes de la crisis económica, para que no se le culpe al desánimo.
Ni siquiera se abren nuevos negocios hosteleros, que parecería lo más fácil (¿para qué, si no viene casi nadie y los pocos que paran lo hacen en verano?

P: ¿Qué es lo que demanda el mundo rural?
R: ¿A qué está dispuesto a renunciar? (y no hablo de los dirigentes, sino del llano)
Quizá no renunciaremos a sentirnos "urbanos", o "villanos" (a pesar de ser "rurales" o "agrarios") Nos encanta ir a León a Carrefour o a El Corte Inglés, o a Ikea o Leroy Merlín a Oviedo, No conozco a nadie (ni mayor, ni menor de 50 años) que vaya a León al cine o al teatro, o a oir música. A los que conozco (no tan jóvenes), van de putas a Guardo o a beber a Cistierna)
¿Objetivos? Desde luego, ninguno parecido a vender carne de calidad, fabricar embutidos con marca local, ser amables trabajadores de la hostelería, citando solo lo más fácil e inmediato...
¿Nos promocionamos?¿Sabe el mundo que existimos? Quizás no les importamos. Incluso si pasan por la N-621 o la N-625. Me dice un amigo que, incluso, en la Revista comarcal, en los últimos números, aparece publicidad de algún negocio que ha desaparecido.

P:¿Lo tenemos?
R: ¿A parte de lo básico? (Una asistencia sanitaria ejemplar, una enseñanza básica excelente, una seguridad pública como no tiene en otras zonas rurales de la provincia. Todo ello gracias a la enorme valía y motivación de los trabajadores públicos que las atienden, claro. Por cierto, todos ellos residentes aquí)
Por lo demás, no tenemos nada.En mi opinión, porque, en realidad, no queremos.

P: ¿Tenemos capacidad para ponerlo en marcha?
R: ¿Tenemos redaños (que se decía antes) para recuperar el valor del esfuerzo, de la asunción de los pequeños fracasos, de (como dijo alguno más arriba) volver a tener orgullo?
Por supuesto. O, por supuesto que no.
En mi opinión, depende de si se crea un revulsivo en ese sentido. Si se hace llegar a los paisanos de esta tierra que deben soñar y luchar por el sueño de que sus hijos no se marcharán.

En lo que respecta a que niegues el pantano, tienes razón. Yo también lo he sufrido.
Pero el agua está ahí y es un líquido. No se puede comprimir. No la empujemos hacia el fondo, nademos encima de ella. No solamente deben sacar provecho de ella en El Páramo o en Tierra de Campos, seamos los primeros en aprovecharla. Adaptémonos, recordando el pasado inmediato, vero viviendo el presente pensando en el futuro.
Un cariñoso abrazo.

P.S.- ¿El anciano que escribe más arriba, no será Aurelio? Con perdón por lo de anciano, que ya sé que es viejo, no anciano ¡ja, ja, ja...!

Anónimo dijo...

Juan, lo mejor que he visto en este blog en mucho tiempo.
Creo que tambien deberia dedicarse un especial en verano, cuando mas lectores hay a este tema de la despoblacion en la Revista de papel.
Tambien se deberia hacer una encuesta seria sobre esto entre la gente que vive aquí y publicarla en la Revista.
Un saludo.

Anónimo dijo...


Pues a mi me parece lo del sr Sordo una cosa sinsentido Que no se da ninguna solución, vamos.
Si no se interesan los políticos no hay nada que hacer
Miguel, no funciona lo de atom No recibo las actualizaciones de los comentarios Mira haber que pasa



Anónimo dijo...



Según Maikel yo debo ser otro troll

jajjajajajaj !!!

Juan Sordo dijo...


No, y lo siento. No tengo soluciones, solo opiniones. Y estas no siempre son las mismas. Cambian en lo consuetudinario, pero no en lo esencial. Son solo ideas.

En cualquier caso, desconfío de quien tiene soluciones milagrosas.

Creo que nuestra tierra se he ido pudriendo con el tiempo. Quizás en los últimos 50 años..., no sé. De existir una solución, tardará en ser efectiva el mismo tiempo que ha tardado el problema en manifestarse.

Cuando era yo rapaz, los problemas se circunscribían a que alguien regaba cuando no correspondía, a que llegaba alguno tarde a la vecera, que otro no segaba su prao a tiempo y no pasaba el carro del vecino o que otro más dejaba el carro en una calleja que no era suya. Cosas menores que, bien se solucionaban domésticamente, o en Concejo, o dirimía, en caso último, el Juez de Paz. Añoro aquella simplicidad.

Ogaño, todo es tremendo, todo el mundo se siente injuriado por bien que digas las cosas. Todo crispación. Ningún diálogo.

Repito: siento no tener soluciones mágicas.

PS- Parece que el "sabio anciano" de anteriores comentarios no es Aurelio... Me disculpo con él por meterme, sin fundamento, en ese pilón.
Ello sin embargo de que es sabio y anciano. Seguramente, como nos pasa a todos, lo primero consecuencia de lo segundo.




Anónimo dijo...


No se puede ser tan pesimista.
Hay que vivir en este mundo y no hace 50 años como Juan.
Lo que necesitamos es poner en valor el turismo de naturaleza y cambiar la vision social de la Montaña de Riaño.
Con los politicos que dominan a la sociedad actula esto es imposible. Es necesario un cambio social de objetivos y mentalidades.
Los pueblos estan llenos de gente de la tercera edad que lastran e impiden el desarrollo y tienen una opinion que influyen en los mas jóvenes.
La gente joven debe reacionar y crear ilusion de cambiar ideas y cosas obsoeltas.
Juntos podemos.

Anónimo dijo...


No se si juan es un pesimista (un pesimista es un optimista bien informado) pero define tu lo que es un joven en esta tierra

Dices que esto esta lleno de viejos (de la tercera edad? vaya gilipollez!) y que es gente que no te gusta porque lastran a los jovenes que no existen

Fenomenal!!! Cargate a los viejos!!!

Es lo que quereis los de ese partido criminal y antisocial que es podemos

Anónimo dijo...


La verdad es que estoy desencantado y un poco asustado con opiniones tan radicales.
Tengo el sentimiento de que, diciendo lo que me parece, despierto demonios. No lo pretendí, ni lo pretendo, ni lo buscaré en el corto futuro que me queda.
Observo que hay odio o, por lo menos, animadversión a los viejos. Quizá se nos culpe de algo irremediable:el embalse de La Remolina, mal llamado de Riaño.
Quizá, los que entonces tenían menos de 25 años de edad, creían que los que eramos algo mayores deberíamos haber hecho algo más de lo que hicimos.
Aquella década fue muy visceral. Y, en los valles de del Yuso y el Esla no podía ser menos.

Entonces, los hombres y mujeres (¡ay, esas mujeres que sostenían la vida familiar!) maduros entendían que algo, importantísimo, cambiaba sus vidas.

Habían ido a las majadas con las ovejas y las vacas. Y habían mandado a los hijos (e hijas, según la corrección social actual) a, primero, Cistierna, para el bachillerato, y, luego, a Madrid, León, etc., mientras ellos seguían segando -alguno a guadaña- y yendo a las majadas.

En mi pobre, subordinada a la de los demás, opinión, el fanatismo actual tiene origen en aquella situación.

Nuestros muertos están debajo de veinte metros de agua. Pero, también, los muertos de sus muertos, y los muertos de los muertos de sus muertos. Y de estos últimos nadie se acordaba, ni se acuerda.

Excepto unos pocos de los que, aún, vivimos. En la Revista Comarcal (obra admirable) es donde se recuerda lo que fuimos y es esperanza de sobrevivencia de ese espíritu.

Un amable saludo y, a los que lo pretendan, no esperéis que me sienta insultado porque, sí, soy viejo.




Anónimo dijo...


Joder¡ No se puede decir más claro.